Pablo Usin: “La vida del tenista no es fácil”

El retiro de Juan Martín del Potro, después de 16 años de carrera dejó mucha tristeza en el mundo del tenis y deportistas en general. Al respecto, el tenista sanjuanino y actual cabeza deportiva de Lawn Tenis Club, Pablo Usin contó como vive el momento desde lo personal y qué pasa por la vida de un tenista, entre exigencias, presiones y riesgos físicos.


“Juan Martín significa mucho para nosotros los tenistas y para los deportistas en general. Nos ha dado muchas alegrías, en Juegos Olímpicos, Copa Davis, con un ranking mundial ocupando los primeros lugares, compitió con los mejores. Tuve la oportunidad de conocerlo personalmente y es muy buena gente. Últimamente no tuvo grandes años por sus lesiones que comenzaron en el 2010, con mucha carga en su muñeca y después su rodilla”, comentó Usin, quien es una categoría menor a Del Potro, pero cuando ambos comenzaron era las promesas del tenis argentino.

“Hay que tener muy buena disciplina para lograr el éxito”

Según comentó el referente del tenis sanjuanino, los tenistas profesionales desde temprana edad tiene un gran exigencia física, con entrenamiento de 6 a 8 horas por día y los partidos duran entre cuatro y cinco horas. A ello se le suma el desgaste psicológico que conlleva.

“La vida del tenista es muy complicada y sacrificada. Hay chicos que dejan sus familias a temprana edad, por ejemplo (Federico) Coria, a los 12 años se fue a Estados Unidos y eso un chico común a esa edad no lo vive, va a la escuela, juega con sus amigos y está con su familia. El tenista desde temprana edad toma decisiones de lo que lleva este deporte en sí. Hay jugadores que tienen la posibilidad de viajar con sus papás, otros no, es un deporte muy caro, donde viven solo los 100 mejores del mundo, el resto la tiene que luchar día a día”, comentó Usin.

“A veces las lesiones nos pueden jugar una mala pasada”

Además, al tratarse de un deporte individual, no en equipo, la competencia es complicada.

“Es un deporte que requiere estar bien al 100% en lo emocional de la cabeza y eso no es fácil porque un tenista también tiene problemas como cualquier otra persona”.